Una petaca del irlandes
para un meseteño
caido de las montañas,
por que hoy la petaca
Amy MacDonald y yo
pensando que el rock
esla vida,
una guitarra, la barra
y mucho que soñar,
hoy la noche nos deshace,
olemos la tristeza
pero crecemos acostumbrados a ella
se consumen en los ceniceros
las frases de la ciudad
en las que nos ha tocado vivir,
pero sobran pseudonimos
tan solo hay que añadir detras el grande
y segundo
del que he heredado la fuerza
para dar el gran concierto,
una petaca, Amy MacDonald,
y mis guitarras, mi bajo, tristes
en el armario,
tendre que saber vivir sin la gloria,
tendre que buscar entre escombros mi olla
para reencotrar la musica,
nada mas por las letras, mis letras,
que siguen sin su tono en sol, ni cuatro notas,
donde y cuando perdi mi propio ritmo,
mi unica cancion tantas veces ensallada
para ser levedad en un amarillento
e irrespirable pentagrama,
si recupero la musica, mi folk,
mi punk de mercadillo sin maqueta
cuando encuentre la verdad de una pua
en movimiento
o de unos dedos arañando viejas canciones,
puta navidad, cuanto derroche y arbol sacrificado
mientras las campanas continuan sin devolverme el tono en sol,
si sigo sin cuerdas olvidare mi pasado
que quiso ser un dia este futuro
que jamas ha existido,
busacame en google
que soy un poeta mas muerto de sed.
Alfonso Valverde Diez (Leon) 2009
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